El edificio Gastizar, al igual que el Donosti (también en la avenida Orinoco), recogen buena parte del espíritu residencial y que caracterizó Las Mercedes du-rante décadas. Su nombre remite a la vieja torre de una casa solariega del pueblo de Ustáriz, en el País Vasco. Aunque su fecha de construcción y proyectista coin-ciden con los del Donosti, aquí se denota una clara evolución del estilo arquitec-tónico vasco. Gastizar se suma a la búsqueda ecléctica que Miguel Salvador mate-rializa en 1950 con el proyecto para la casa-club del Centro Vasco de Caracas (El Paraíso). Sin perder el aspecto de una casa grande, son interesantes las diferen-cias que se introducen con relación al edificio Donosti, considerado este como primera variante del tipo del que se parte. En el Gastizar, a diferencia del Donos-ti, se apela a una mayor expresividad y dinamismo de la fachada principal, va-riando la proporción de los llenos, modificando el uso de los materiales como or-namento, resaltando verticalmente su cuerpo central y jugando con la disposición de los techos, sin alterar demasiado las perforaciones dentro del planteamiento absolutamente simétrico que rige su composición. La dimensión de la planta, más rectangular y la disposición de los servicios en la distribución de los apartamen-tos, se ubican concentrados en torno al patio que permite la ventilación natural. El buen estado de conservación que presenta lo que la convierten en una excep-cional huella de la arquitectura neovazca en Caracas. ACA