Zonas de Caracas

Caracas 

a través de sus planos

Plano general de las nuevas avenidas, calles y carreteras, 1938. Ministerio de Obras Públicas.HC-45

Vientos de renovación

Según señala Irma de Sola: «Con el establecimiento de un nuevo régimen político, en todos los órdenes de la vida venezolana se sentía soplar un viento de renovación que se traduce en hechos e ideas que dan fe del afán de ponerse al día en todo que durante años estuvo estancado».1

En 1938, Maurice Rotival presenta un proyecto para los estudios preliminares de la distribución de las nuevas avenidas, calles y carreteras. La actuación urbanística en el centro y la lógica de infraestructuras viales para el valle y sus alrededores nos confirman la visión de una capital monumentalizada en su núcleo fundacional y con nuevos asentamientos periféricos. De hecho, con su propuesta reafirma la importancia que adquiere la vialidad entre un área central modernizada y las nuevas periferias urbanas que se agregan y que se sugieren opuestas a la densidad e intensidad del uso metropolitano en el centro. El plano de la circulación futura con las nuevas avenidas y calles que propone Rotival presenta la sustitución del orden bidireccional de la trama fundacional, que se desarrolló durante casi cuatrocientos años, por un eje lineal de dirección este-oeste que se vincula a las periferias urbanas a través de un sistema de vías jerarquizadas que se apoyan en el establecimiento de rotondas o nodos de articulación como mecanismo para hilvanar fragmentos dispersos en el territorio.

El diseño de otra ciudad, distinta a la trama originaria, queda totalmente confirmado en la noción haussmanniana de demolición de un importante conjunto de manzanas del centro fundacional y en la introducción de una serie de diagonales que, siguiendo el ejemplo de otras ciudades importantes, establece una conexión entre el centro y las periferias. Sin embargo, a diferencia de la lógica con la que se plantea la trama de cuadrícula de la ciudad fundacional, la estructura urbana que se genera a partir del plan de Rotival de 1939, lejos de ser organizadora de la totalidad en que opera, como era su intención original, detonará en un desarrollo por agregación de grandes paños agrícolas aislados, que se vinculan a ejes de dirección este-oeste y que tienen fronteras violentas en su relación o tejido con sus bordes inmediatos, lo que genera con ello discontinuidades y fricciones en el encuentro de sus tramas y elementos. El plan no contempla la continuación de la ciudad a través de la extensión de la cuadrícula, sino la creación de un nuevo centro urbano inscrito en el trazado fundacional y cuya extensión se realizará a partir de operaciones de infraestructura viaria que posibilitan conectar dicho centro urbano con las nuevas urbanizaciones en la periferia.

Con el nuevo eje monumental se confirma la expansión de la ciudad en el valle y el reconocimiento de nuevas periferias satélites a éste.2 FV/IGV

NOTAS

1 De Sola Ricardo, Irma. Contribución al estudio de los planos de Caracas. Pág. 164.
2 Texto de Nancy Dembo, José Rosas Vera e Iván González Viso.