Zonas de Caracas

Caracas 

a través de sus planos

Plano de Caracas, 1956. Elaborado por la Ingeniería Municipal.HC-59

Las ciudades dentro de la ciudad, una nueva escala

Con los lineamientos del Plano Regulador de 1951 se confirmarán así unas directrices que posibilitan terrenos propicios para la exploración arquitectónica moderna, autónoma de las lógicas de la cuadrícula de la ciudad fundacional, con una estructura formal de las edificaciones vinculada a las condiciones que estas establecerían con el entorno en que fueron situadas. El plano evidencia la fuerza con que irrumpe la nueva visión del urbanismo moderno en la década del 50, copada por la obra y el estilo del gobierno de Marcos Pérez Jiménez, decidido a crear una ciudad distinta, con otro ritmo, donde predominan la búsqueda de una nueva escala, el dominio de la geografía, la exploración de la ciudad ideal, el funcionalismo externo y el estilismo anónimo. Nuevos modelos urbanos irán conquistando la periferia con espíritu moderno. Esta nueva visión formal y funcional, que debía calzar en lo que el dictador llamó «El Nuevo Ideal Nacional», al no poder cambiar la totalidad de Caracas, se manifiesta principalmente creando aislados prototipos urbanos, ciudades dentro de la ciudad. Estos nuevos esquemas de ciudad moderna se establecen con un orden propio, no concebidos para integrarse al resto de la ciudad y formar parte integral de su textura, más bien conforman infraestructuras autónomas interconectadas por autopistas.

«La verdadera modernidad visual y urbana se plantea simbólicamente a partir del 1° de enero de 1950, con la inauguración de la avenida Bolívar y se prolonga en un esfuerzo monumental hasta el 23 de enero de 1957, cuando la metrópoli abarca la extensión total de su territorio»5. «El Centro Cívico y Federal, luego llamado Centro Simón Bolívar, apareció como la variación formal de la construcción histórica de El Silencio y el Plan Rotival con la construcción de dos estructuras metálicas que emergían como rascacielos y un hueco descomunal de 200.000 m2 de superficie y 40 m de profundidad; la ciudad obrera “2 de Diciembre”, luego llamada 23 de Enero, se instaló en la ciudad tradicional con prismas escultóricamente dispuestos para resolver el problema del “rancho” a través de una ciudad social como respuesta a un proyecto de Estado que integraba la utopía funcional con la ciudad jardín; la Ciudad Universitaria de Caracas se construyó como un proyecto audaz sin precedentes en el urbanismo moderno continental, un campo para la experimentación estética, tecnológica y urbana, donde se desarrolla la propuesta de la síntesis de la artes; el Sistema de la Nacionalidad generó un escenario autoritario para conmemorar los ritos militares de la Semana de la Patria generando “un diálogo entre los precursores de la independencia y los héroes militares”»6; El Helicoide de Roca Tarpeya, moderno y futurista, se construyó como un esfuerzo de excavación sin precedentes como el remate idílico y formal de un gran proyecto recreacional definido en siete colinas existentes a partir del Jardín Botánico7; y el Hipódromo La Rinconada se construyó como espacio para la diversión y la apuesta.

Todos estas obras, junto a otras obras monumentales como el Hotel Tamanaco, la Plaza Venezuela, el Club Táchira, el sistema teleférico y el Hotel Humboldt, se construyen como hitos de la ciudad moderna situados estratégicamente, las cuales plantean una nueva escala y una nueva dimensión metropolitana, relacionados por medio de sistemas de movimiento, apoyados sobre los avances de la ingeniería, que irrumpen con una visión renovadora, lo que cambia el sentido de la ciudad, desde el punto de vista de la planificación, y abrazó aspectos de orden funcional, rentable y aún de «ornato para la capital de la república». Estas osadas intervenciones, que dominaron lo geográfico, revelan las infinitas posibilidades de desarrollo, construcción y presencia de la modernidad en los lugares más inaccesibles.

El proceso modernizador de la ciudad, manifiesto en la expansión de la estructura urbana y el cambio de escala, se vio orientado por las grandes obras de vialidad, lo que privilegió la movilidad, apoyado en los avances de la ingeniería. Este fenómeno explica cómo la intención de incorporar la ciudad suburbana, contemplada en el Plan Rotival, se vio distorsionada al modificar las tramas que permitirían conectar los nuevos prototipos de ciudad moderna y los nuevos subcentros urbanos, lo que produjo una estructura policéntrica alejada de la intención original. A su vez, los nuevos prototipos otorgarían a la ciudad una nueva imagen ícono, que la posicionaría como capital en el mundo.8

NOTAS

5 Niño Araque, 2004, pág. 153.
6 Hernández de Lasala, 1990, pág. 230.
7 Niño Araque, 2004, pág. 173.
8 Texto con la colaboración de Nancy Dembo y José Rosas Vera.