Zonas de Caracas

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El Club de Golf del Caracas Country Club es un desarrollo pionero del urbanismo residencial en la ciudad, que logró integrar el diseño urbano con el paisajismo natural del valle. Su historia comienza con la demolición de la Casa Blandín en 1929, ubicada en la antigua Hacienda Blandín (primera que introdujo el cultivo de café en el valle de Caracas). Los terrenos de la antigua hacienda, junto a los de las haciendas Lecuna, el Samán y la Granja, fueron adquiridos por el Sindicato Blandín (constituido por las familias Vaamonde, Phelps, Hauck, Brandt, Machado y Arismendi) y desarrollados por la oficina de arquitectura paisajista Olmsted Brothers Associates, gracias a la recomendación personal que le hiciera Nelson Rockefeller para el trazado de la urbanización campestre. La firma norteamericana de Olmsted, padre del paisajismo americano (quien diseñó Central Park en Nueva York hacia 1850), planteó aprovechar el valor del escénico paisaje de la Hacienda Blandín, la presencia de grandes árboles como mangos, bucares rosados, mijaos y sus incomparables vistas sobre el valle de Chacao y el pico Ávila. El plan maestro colocó la casa club en el mismo sitio donde se ubicaba la casa de hacienda, manteniendo la relación entre la vieja casona y su entorno, reafirmando los valores paisajísticos del existente camino Blandín flanqueado por palmas washingtonias en la avenida principal y un inolvidable túnel de bambú en el acceso a la casa club. El puente sobre la quebrada Chacaíto (siglo XVIII) también se mantuvo en su ubicación tradicional, mientras que la vía de acceso, paralela a la quebrada de Chacaíto, se planteó a lo largo del arroyo que regaba la plantacion de café, lo que reforzó la costumbre de arbolar las entradas a las haciendas en el valle de Caracas, entre los años 30 y 40 (tal como la avenida Vollmer en San Bernardino o la avenida del Parque en Campo Alegre). Los campos de golf, diseñados por el arquitecto norteamericano C. H. Banks, fueron construidos en dos etapas (nueve hoyos en 1930, y el resto en 1934), preservando la topografía natural de las faldas del Ávila y reforzando las vistas hacia las colinas del sur y la montaña. Para conservar intactos los árboles centenarios que aún hoy vemos florecer, se trazaron parcelas de formas irregulares y se desvió el trazado de las calles, colocando grandes extensiones de grama bordeadas por masas de árboles al mejor estilo del movimiento internacional Garden City. Los planos y documentos de esta urbanización única en Venezuela forman parte del archivo histórico del Frederick Law Olmsted National Historic Site, y de la Manuscript Division de la Biblioteca del Congreso en Washington, D.C. IGV / MIP