Zonas de Caracas

Zona 5 Hacia El Cementerio


«En su afán de progreso y civilización, Guzmán Blanco inaugura oficialmente en 1876 el Cementerio General del Sur, avanzando
el casco urbano sobre tierras tradicionalmente agrícolas.» 

Arturo Almandoz

Santiago de León de Caracas 1576-2030

 

El Cementerio es un enclave llano, ubicado entre dos cerros que bordean, a su vez a los ríos, Guaire (norte) y El Valle (sur), ensartado por la autopista elevada que va de Caracas a La Guaira (oeste) y surcado por una triada vial: las avenidas Prado de María, Nueva Granada y Victoria (este) que convergen en la Roca Tarpeya con El Helicoide. Hacia el límite sur la avenida Roosevelt atraviesa el distribuidor La Bandera.

En 1776, aparece una conexión hacia los asentamientos agrícolas pertenecientes a la familia Jugo, en El Valle. Este pequeño valle plano fue un camino expedito hacia el sur del damero fundacional desde El Peaje, que con el tiempo se transforma en la avenida Nueva Granada. En 1876 se inaugura el Cementerio General del Sur, que organiza los camposantos diseminados que existían en la ciudad. Con motivo del recorrido que suponen las ceremonias fúnebres, el presidente Antonio Guzmán Blanco le encarga al ingeniero Juan de Dios Monserrate (1877), la ampliación del camino entre Roca Tarpeya y El Portachuelo desde el centro de la ciudad para facilitar el paso hasta el camposanto. En 1895, promovido por la Iglesia católica, se desarrolla un plan de viviendas para familias de ingresos modestos hacia lo que hoy se conoce como Prado de María. En 1938 se desarrollan los sectores de Los Cármenes del Rincón, Los Castaños y la avenida Roosevelt. También los barrios comienzan a consolidarse: Las Luces, La Providencia, Los Rosales, San Miguel y aparece el mercado popular en la avenida Los Alpes. En los años 50 la vinculación entre El Valle y El Cementerio se consolida gracias a la construcción de la autopista. La construcción del Instituto Venezolano de Los Seguros Sociales en la avenida Principal de El Cementerio y otros servicios la activan a niveles metropolitanos. En 1967 se traslada el antiguo mercado al espacio debajo de la autopista y termina de configurarse el universo urbano de la zona.

Una extensa retícula de manzanas (125) con casas entre medianeras y patios se desarrolla en la parte plana, con un perfil bastante homogéneo alternado con algunas edificaciones elevadas que lo rompen. La intensa actividad comercial informal, generada en la extensión de la avenida Principal de El Cementerio (unas doce cuadras) derivó en la reciente construcción del bulevar César Rengifo, que ubica de manera concentrada, además de los comercios sobre el bulevar, grandes galpones industriales transformados en mercadillos de artículos de vestir, que son motivo de recorridos guiados para compradores al mayor y al detal.

De la tríada vial, la avenida Nueva Granada asoma posibilidades de ser un gran corredor de transporte público, gracias a la reciente intervención en su eje central del sistema de transporte superficial Bus Caracas. Sobre esta vía está el edificio de mayor valor arquitectónico, el INCE (hoy Inces), del arquitecto Tomás José Sanabria, cuya fachada exhibe una obra escultórica de Gego y Leufert, sugiriendo un potencial de la escala urbana que pudo tener la avenida, considerando su vitalidad inter-conectora. La avenida Presidente Medina, antigua avenida Victoria, reúne un conjunto notable de edificios modernos de carácter arquitectónico patrimonial, que limita con El Helicoide al oeste y cuya perspectiva remata visualmente sobre la cúpula de la iglesia San Pedro al este. Esta ultima ostenta una arquitectura de inspiración manierista, con esculturas en pie sobre la fachada, inusual en nuestra ciudad. El tercer elemento vial, que traza la base de los triángulos de las distintas sub-zonas residenciales, lo conforma la avenida Roosevelt, que atraviesa en sentido este-oeste desde la avenida Los Ilustres hasta tocar la Unidad Escolar Gran Colombia, cercana a la iglesia La Milagrosa de Prado de María, de interesante valor histórico.

Quizás un de las áreas que le imprime un carácter único a la zona, además del mercado, es El Cementerio General del Sur. Donde coexisten los distintos mausoleos, criptas familiares, altares y pequeños monumentos particulares adornados con piezas realizadas por magníficos escultores. Su conjunto se ordena a partir de una plaza inicial con un altar de orden clásico, desde donde se desprende un trazado vial en tríada que introduce a los visitantes al cementerio, que se desarrolla sobre la topografía de las colinas que finalizan el lindero de la zona hacia el cementerio. Una experiencia que sin duda vale la pena visitar. MIP